La administración Sheinbaum plantará más de 1,400 productos mientras buscamos preservar el T-MEC, un acuerdo que protege más de $800 mil millones en comercio entre Estados Unidos y México anualmente. Negociaciones y aceptación del aumento de precios relacionados con escalas en países como China, India, Tailandia, Tailandia, socio comercial de Estados Unidos. Las medidas que también representan la respuesta es que el gobierno de México por su parte vigile el impuesto. Los nuevos precios dejan 55 mil millones de dólares en fondos públicos, según estudios de investigación públicos, dinero que puede ayudar a reducir el déficit económico.
La solicitud será sometida a discusión este lunes en el Gabinete de Economía y está dispuesta a ser aprobada en el largo plazo. Los documentos propuestos incluyen aranceles de entre 7% y 50% a bienes manufacturados, textiles, cuero, papel y papel sin un acuerdo de libre comercio con México. Luego de varias mesas de trabajo con el empresariado mexicano, el Legislativo redujo ciertos precios, respecto a la propuesta original de los Ejecutivos, que también se considera para el 50% de los bienes de capital. A raíz de estas negociaciones con los legisladores se advirtió a los industriales que el aumento de impuestos a miles causará problemas por cosas que México no produce.
En medio de la discusión también se prepara la evaluación del T-MEC, ante los constantes cuestionamientos de Estados Unidos para cuidar el acuerdo comercial. Gracias al acuerdo, que se pondrá a prueba en julio de 2026, México envía más del 80% de sus exportaciones al país del norte. La corriente de cambios en el comercio seguirá volando este año, a pesar de que los precios en Washington han dado una imagen de México en la maldición, el aluminio, el cobre, los autos fuera del T-MEC.
La segunda economía de América Latina llega a las puertas de las negociaciones en poco tiempo, con el PIB en falso y con caída de lo público y lo privado. Por tanto, el cálculo de la demanda de ingresos para el nuevo muro en Asia no es un asunto menor. El impacto económico de las Sheinbaum es uno de los atractivos de la propuesta, dicen relacionados con el proyecto, según el proyecto, y busca una buena relación entre las empresas mexicanas y los competidores mexicanos. Poner impuestos a los productos, según el apoyo del gobierno, incentivará su producción, promoverá las exportaciones y fortalecerá las cadenas de valor.
México exporta más de 129 mil millones de dólares al año desde China, pero exporta menos de 9 mil millones de dólares al gigante asiático. Superar estas ineficiencias ha sido una de las principales semillas del compromiso de Sheinbaum de invertir en diseños, autopartes, metales y otros productos de alta calidad provenientes de Asia. Sin embargo, la industria y los expertos advierten que la implementación repentina de los aranceles también generará mayores costos y pérdidas para las empresas mexicanas.
Adolfo Labarde, experto en comercio exterior de Cidiyo, señala que, si bien las olas de Estados Unidos utilizan métodos para ayudar a los norteamericanos, también representarán el dinero disponible por los nuevos precios o mirando a otros. «Habrá un aumento de precios y será difícil encontrar trelices de estos productos, que ya fueron elaborados por una mujer como en Japón, pero eso significa que la cantidad», señala.
Lo que provoca que traigan las nuevas aportaciones afecta al bolsillo de los ciudadanos. «Estos precios son pagados por los consumidores nacionales y representan, bajo ciertas condiciones, transferencias al gobierno y a los productores», es uno de los estudios que contiene el estudio de los costos del conflicto. El organismo que depende de la Cámara baja recomienda que se limiten los trabajos y se sepa que son más difíciles ante la subida de precios y no desincentivar la inversión interna y externa.