El ministro de Educación y Ciencias, Luis Ramírez, dijo que está en curso una investigación interna para determinar si funcionarios públicos tuvieron participación en la filtración de respuestas de exámenes de ingreso para institutos de formación docente.
En conversación con medios de comunicación este martes, el ministro de Educación, Luis Ramírez, comentó sobre el escándalo de supuesto fraude en exámenes de ingreso para institutos de formación docente y dijo que, en paralelo a la denuncia formal presentada por el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) ante la Fiscalía, está en curso una investigación “interna”.
El 22 de abril, el MEC anunció la anulación de casi la mitad de los exámenes de ingreso para institutos de formación docente realizados a principios de ese mes, ante sospechas de fraude.
El caso fue denunciado ante el Ministerio Público y esta semana se anunció la ampliación de la denuncia luego de que hicieran públicas capturas de supuestas conversaciones en WhatsApp en las que la concejal municipal de Lambaré Carolina González, esposa del exdiputado colorado cartista Orlando Arévalo, presuntamente filtró respuestas de los exámenes.
“Investigación interna”
Además, indicó que está en marcha una “investigación interna” sobre la forma en que se filtraron las respuestas y afirmó que “si hay alguien dentro del circuito” del MEC que tuvo participación en las irregularidades “vamos a tomar medidas correctivas”.
Para el nuevo examen al que se someterán los postulantes cuyas pruebas fueron anuladas, el ministro señaló que “hay que tomar medidas nuevas, organizar de manera diferente, mantener un sistema de control cruzado con más personas que participen, sobre todo desde la Rectoría del MEC” para asegurar que las respuestas no vuelvan a filtrarse.
Segunda oportunidad para postulantes
El ministro Ramírez comentó también sobre las objeciones a que los postulantes cuyos exámenes fueron anulados por el supuesto fraude vuelvan a rendir, planteadas por algunos sectores de la comunidad educativa.
Señaló que normalmente a un postulante se le negaría otra oportunidad de rendir si fuera él quien cometió el fraude, pero en este caso “los elementos nos muestran otra realidad, otro mecanismo” por el cual el supuesto fraude sería responsabilidad de las personas que proveyeron las respuestas filtradas.
